Uno de esos tantos días confusos en que no sabes que sentir,
pero sabes que sientes mal, sea lo que sea que sientas,
al menos sabes que sientes, me fuí a correr, tomé mi pod y le dí
PLAY y que salieran todas las canciones que tenía mezcladas.
Cada dos pasos le ponía NEXT, ninguna era mi canción, algunas
me recordaban a momentos pasados que ahora no significan nada,
y otras eran muy felices para mi ánimo, o demasiado dramáticas para
lo que sentía el caso es que no encontraba mi canción.
Si bien Bunbury siempre ha sido mi salvación musical para estados de ánimo
peligros como dice el, no era la opción más sensata y ni en sus canciones encontraba
esa que describiera lo que sentía.
El soundtrack de mi vida, esas palabras que acompañadas de buena música expresaran
o definieran lo que ni siquiera yo era capáz de definir,me dí por vencida, concluí que si
ni siquiera yo podía entender mis sentimientos, ninguna canción lo lograría.
Me fuí a la opción artistas busque música para hacer ejercicios y ahora si:
(8) spice girls! , shakira! britney y toda esa música que definitivamente no te hace pensar.
tan tan.
1 comentario:
maravilloso, uno de tus mejores post identificado completamente
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